martes, 17 de noviembre de 2015

De Garcia Lorca


Regar la mente con buena lectura


Un rato para leer todos los dias


Dicho ...


Aprender a leer


Organiza bien tu biblioteca


Tippos de lectores ¿Quién eres tú)


De Jimmy Wales (Fundador de Wikipedia)


jueves, 15 de octubre de 2015

Nuevas tecnologias


Iconos


Leer


Beneficios de la lectura para la salud mental


Ojos que no leen ...


Imagen


Proverbio hindú


Una de humor


Leer siempre te dará cosas positivas










jueves, 8 de octubre de 2015

Dos simples técnicas de Lectura Rápida

Dos simples técnicas de Lectura Rápida

Si quieres leer y aprender más en menos tiempo, si quieres aumentar tu velocidad de la lectura aumentando a la vez la comprensión de los textos, comienza con estas dos sencillas técnicas de lectura ágil.
Dentro de los muchos métodos que se pueden mencionar, hoy resaltamos dos técnicas básicas ‘el marcador’ y ‘la fijación’.
¿Estás listo para empezar? ¡Vamos allá!
¿Has analizado alguna vez la forma en que los niños intentan reconocer y aprender nuevas palabras u objetos?
Alargan su dedo y lo señalan como si quisieran alcanzarlo.
Precisamente de esto se trata el proceso del marcador para la lectura rápida, de establecer una conexión entre el texto que lees y tu cerebro.
Generalmente cuando un niño intenta seguir una lectura con su dedo el adulto retira su mano y lo indica como un comportamiento indebido. Es justo ahí cuando el proceso pasa a ser un trabajo para sus ojos y se dificulta un poco más el aprendizaje y es probable que el niño cometa, de adulto, algunos de estos errores de lectura.
Stendal decía: “El intelectual es, sencillamente, un ser humano que cuando lee un libro tiene un lápiz en la mano”.
¿Qué piensas utilizar para practicarlo?
Empieza a seguir tu lectura con un bolígrafo, lápiz, palito chino o cualquier otra herramienta similar que no obstaculice la lectura. Notarás como mejora tu concentración y el proceso de absorción de la información será mucho más rápido.


Ahora bien, hablemos de la segunda técnica ¿en qué consiste la fijación?
Lo primero que debes saber es que esta técnica se trabaja en varios niveles. A medida que se supera un nivel, se incrementa su complejidad y se potencian los resultados. Hoy me centraré en la parte más básica de la fijación.
Para comprender el significado de fijación es necesario saber antes que, cada vez que leemos, el ojo realiza pausas y saltos. El ojo necesita enfocar en cada fijación, como lo hace una cámara fotográfica.
Los saltos son propios del avance de la lectura y se dan, generalmente, de izquierda a derecha; las pausas son el proceso de enfocar y el descanso del ojo. Estas pausas son muy cortas, pero todo va sumando y si tienes en cuenta el gran número de fijaciones que realizamos durante la lectura, estas pausas suman bastante tiempo.
Además las fijaciones son lo que cansa los ojos durante la lectura y causa problemas de concentración.
Sabiendo esto, la fijación no es más que el punto donde se detiene la vista para leer.
Lo que se pretende con la técnica de fijación es disminuir el número de fijaciones para acelerar la lectura. Es decir, no será necesario que fijes la vista palabra por palabra porque el ser humano puede leer agrupando palabras y a medida que va avanzando hasta renglones enteros con una sola fijación.
Un ejemplo puntual:
Lo común es leer así, fijando la vista en cada palabra…
la – luna – es – elegante – y – redonda
Cuando empiezas a trabajar la técnicas de fijación pasaría a ser así…
la luna – es elegante – y redonda
… Y más tarde, así:
la luna es – elegante y redonda
… Y así:
la luna es elegante y redonda
Otro ejemplo:

Para practicarlo, utiliza el marcador para marcar tus puntos de fijación. Primero pausa la punta del marcador debajo de cada palabra y haz una fijación consciente en ella. Practica esto hasta que seas consciente de las fijaciones que haces.
Después aumentas el ritmo. Ya no pausas la punta del marcador en cada palabra, sino haces por ejemplo 4 saltos por línea. Fijando tu vista en la punta del marcador intentas identificar 2-3 palabras a la vez sin cambiar tu fijación. Una vez que esto te salga sin demasiado esfuerzo, vuelves  a aumentar el ritmo.



La lectura retrasa el Alzheimer

La lectura retrasa el Alzheimer




Entre mayor sea el gusto por la lectura y el estudio, las personas tendrán menor probabilidad de desarrollar la enfermedad del Alzheimer cuando sean adultos, aseguró el neurólogo clínico Hugo Navarrete Báez.

En entrevista, dijo que la lectura previene el padecimiento, por lo que recomendó que, si no les gusta estudiar, por lo menos lean una hora diaria, ya que puede ayudar a producir más arborizaciones y conexiones neuronales.

En el marco del Día mundial del Alzheimer, indicó que, de alguna forma, la lectura retarda la aparición de la enfermedad del Alzheimer si llegara a presentarse, o la previene a largo plazo, cuando una persona ya está marcada genéticamente no se puede hacer nada.

El especialista comentó que las medidas como la dieta, el ejercicio, la terapia cognitiva, la lectura y el estudio pueden retrasar la aparición del Alzheimer o, si se presenta, hacer que se vaya más lento el padecimiento.

Mencionó que, “por ejemplo, los desprotegidos o pobres de la calle son los que están más expuestos a presentar Alzheimer, por tener poca o nula educación. Cuando una persona se encuentra constantemente leyendo o estudiando se van creando más conexiones”.

Además, el neurólogo Navarrete Báez expresó que el Alzheimer es una enfermedad degenerativa progresiva, la cual se presenta de forma muy frecuente en personas de los 65 años de edad, aunque se puede presentar en jóvenes.

Estadísticamente, de los 80 años en adelante, una de cada tres personas presenta esta enfermedad. La edad más joven en que se puede presentar es alrededor de los 40 a 65 años.

Actualmente, expuso, la pirámide poblacional, la base, la parte más amplia es de menores de 10 años. Para 2050, va estar igual, menores de 10 años y gente alrededor de los 80 años, por lo que es importante delinear esta enfermedad.

Las medidas de prevención que pueden disminuir la velocidad de progresión del padecimiento, en un momento dado, no evitarlo pero por lo menor retardar su aparición.

“Se puede retardar la aparición por medio de marcadores genéticos y otros tipos de marcadores que se estudian en el líquido cefalorraquídeo. Es el líquido que corre a través del cerebro hacia la medula espinal”, comentó.

Existen pruebas genéticas que pueden determinar cuando una persona tiene Alzheimer desde que nace, en personas que son negativas para las pruebas genéticas se recomienda hacer ejercicio y evitar todos las adicciones, sobretodo el tabaquismo, alcoholismo, drogas.
Hay laboratorios en Europa y Estados Unidos donde se puede mandar hacer el examen para detectar el Alzheimer cuando nace un bebé, pero no de manera rutinaria.

El promedio aproximado de duración con Alzheimer es entre 10 y 12 años, se recomiendan medicamentos que no curan, pero si tienen nivel de eficacia comprobada moderada. Hay cuatro que son: Rivastimina, Galantamina, Donepezilo y la Memantina.

Est
os medicamentos ayudan a recuperar parte de la memoria. Son neuroprotección, protegen las neuronas y pueden retrasar la velocidad de progresión del padecimiento. “No lo curan, protegen y retrasan la pérdida de función cognitiva, memoria y lenguaje”.

En la mayoría de la veces, dijo, la persona no se da cuenta que tiene la enfermedad del Alzheime. Los familiares son los que empiezan a notar, se dan cuenta por la falla en la memoria en forma constante y que preguntan lo mismo de forma repetitiva.

Para darse cuenta si es la enfermedad del Alzheimer o un síntoma de la edad, se tiene que acudir al médico para que le realicen pruebas neuropsicológicas. Éstas son pruebas especiales que incluye la memoria de forma primordial.

El diagnóstico para determinar el Alzheimer es a base de fallas de memoria constantes que va a perturbar al paciente en sus actividades, no puede realizar bien su trabajo o actividad de casa.

Aunado a eso, tienen que hacerse pruebas neuropsicológicas y estudios de sangre, al igual que pruebas de imagen y radiografías especiales como son tomografías o resonancias magnéticas cerebrales.

“A la larga, si no se trata medicamente y adecuadamente, también la depresión severa o prolongada es un factor de riesgo donde se puede presentar Alzheimer”.

Una persona de 30 o 40 años podría tener Alzheimer si es por marcador genético. “Si no, la probabilidad es muy baja, a un 2% a esa edad. Generalmente cuando hay problemas de memoria es por la tensión”, concluyó el especialista.




miércoles, 7 de octubre de 2015

¡Te gustan los libros!


Buscando aventuras con la lectura


Beneficios para la salud con la lectura


Frase de Fabricio Caivano


Vitamina Sé


Leer para reflexionar


5 consejos para rescatar el hábito de la lectura

5 consejos para rescatar el hábito de la lectura

1) Limita el horario que miras televisión
Es probable que gran parte de tu tiempo libre lo dediques a mirar televisión o series en la computadora. Si bien esto no está mal, sería bueno que alternaras esta práctica con la lectura. Por ejemplo, destinando 50 minutos a mirar un capítulo de una serie y otros 50 minutos a leer un libro de tu interés.
 2) Lee unas páginas antes de dormir
Nadie dice que tengas que leer una hora por día, pero sí que destines al menos 15 minutos antes de irte a dormir a leer algo que sea de tu interés de manera interrumpida. Pensando en un mes, alcanzarías las 7 horas y media al mes, nada mal, ¿no?
 3) Lee libros cortos
Las personas que no están habituadas a leer, suelen asustarse con la extensión de los libros, lo que hace que decidan dejarla para otro momento. La solución a esto es leer libros más cortos, que no te demanden demasiado tiempo y que sean fáciles de leer.
 4) Elige tu lugar preferido para leer
Cada lector tiene sus preferencias y entre ellas se encuentran los lugares elegidos para leer. Algunos prefieren leer al aire libre y otros en la biblioteca. ¿Qué prefieres tú?
 5) Piensa en los beneficios de la lectura
Además de instruirte, los libros ofrecen distintos beneficios. ¿Cuáles son estos?
 – Abre la cabeza y te ayuda a libertarte
– Da herramientas para defenderse del mundo y enfrentar el futuro
– Es divertido
– Te enseña distintas maneras de ver el mundo
– Hace que el tiempo pase más rápido
– Es una manera divertida y sencilla de aprender
– Te ayuda a ampliar tu vocabulario

– Motivá tu imaginación y creatividad

viernes, 24 de julio de 2015

Relax



un osasis llamado biblioteca


50 escritores con seudónimo

50 escritores con seudónimo

Para escribir sin presión, para publicar más de un libro al año, para no ser juzgadas por su sexo, para proteger el nombre de su familia… Estos son solo algunos de los motivos por los que los escritores deciden ocultar su verdadero nombre bajo un seudónimo.
A continuación os dejo 50 escritores y escritoras que utilizaron seudónimo, ¿los conoces a todos? ¿los has leído?:
Anne Rampling = Anne Rice
Azorín = José Martínez Ruiz
Beaumarchais = Pierre-Augustin Caron
Benjamin Black = John Banville
Blue Jeans = Francisco de Paula Fernández
Boz = Charles Dickens
Carlo Collodi = Carlo Lorenzini
Clarín = Leopoldo García-Alas y Ureña
Colette = Gabrielle Sidonie
Currer, Ellis y Acton Bell = Las hermanas Brönte (Charlotte, Emily, Anne)
Fernán Caballero = Cecilia Böhl de Faber y Larrea
Forges = Antonio Fraguas
Gabriela Mistral = Lucila de María del Perpetuo Socorro Godoy Alcayaga
George Orwell = Eric Blair
Gipi = Gian Alfonso Pacinotti
Herge = Georges Remi
J.D. Robb = Nora Roberts
Jack London = John Griffith Chaney
James Herriot = James Alfred Wight
Jan = Juan López Fernández
Jason = John Arne Saeteroy
John Lange = Michael Crichton
Kurban Said = Lev Nussimbaum y Essas Bey
Lautremont = Isidore Ducasse
Lemony Snicket = Daniel Handler
Lewis Carroll = Charles Lutwidge Dodgson
Mark Twain = Samuel Langhorne Clemens
Marquesa Colombi = María Antonieta Toirriani
Moebius = Jean Giraud
Moliere = Jean Baptiste Poquelin
O. Henry = William Sidney Porter
Pablo Neruda = Neftalí Ricardo Reyes
Paul French = Isaac Asimov
Quino = Joaquín Lavado Tejón
Richard Bachman = Stephen King
Rius = Eduaro del Río García
Robert Galbraith = J.K. Rowling
Robinson Crusoe = Daniel Defoe
Rubén Darío = Félix Rubén García Sarmiento
Saki = Hector Hugh Munro
Sjón = Sigurjón Birgir Sigurdsoon
Stan Lee = Stanley Martin Lieber
Stendhal = Marie-Henri Beyle
Dr. Seuss = Theo Lesieg
Trevanian = Rodney Whitaker
Troy Denning = Richard Awlinson
Victoria Holt = Jean Plaidy
Virginia Woolf = Adeline Virginia Stephen
Voltaire = François-Marie Arouet
Yukio Mishima = Hiraoka Kimitake


miércoles, 22 de julio de 2015

Feliz miércoles a todos


Breve historia de internet


Leer es crecer


Consejos para cuidar los libros


¿Pilas recargadas?


Der la inquietud a la melancolia


lectura = pequeña guia


Datos curiosos sobre la historia de los libros

El 23 de abril se celebra el Día Internacional del Libro. Esta fecha fue elegida porque curiosamente se conmemora la muerte de los dos más grandes escritores de la Humanidad: Miguel de Cervantes Saavedra y William Shakespeare.
Por ello, hoy compartiremos algunos datos curiosos sobre la historia del libro. Así que comencemos este recorrido.
Se estima que el surgimiento y desarrollo de la escritura se dio entre los 7000 y 4000 a.C. El primer soporte utilizado para grabar esas tempranas formas de escritura podían ser piedras, tablas de madera, huesos, etcétera. En la Mesopotamia, se usaban tabletas de arcillas; se escribía en ellas con un instrumento mientras la arcilla estaba húmeda y luego se secaban al fuego. Estas tabletas datan del 7000 a.C.
El procesamiento de la planta de papiro en el Antiguo Egipto dio lugar a los rollos de papiro que fueron utilizados para la escritura. Los rollos podían superar los 10 metros y en ellos los escribas utilizaban al escritura hierática para plasmar historias; algunas eran tan extensas que los rollos llegaban a medir 40 metros, como en el caso de la historia del reinado de Ramses III.
Alrededor del siglo I, se inventó el papel en China, tras siglos de usar hueso, madera o hasta seda como soportes para la escritura. Se imprimía sobre el papel mediante la técnica de xilografía, tallando una matriz de madera que se rellenaba con tinta y se prensaba el papel. 
Influenciados por la proliferación del libro en Grecia, los romanos comenzaron con la producción y edición de libros en el siglo I de nuestra era. Si bien el libro comenzó a extenderse por los límites del Imperio, las bibliotecas eran privadas. Hacia fines del siglo IV, Roma contaba con unas 28 bibliotecas.
Los monasterios se convirtieron en centros de conservación de varios textos de la antigüedad. Recluidos en los monasterios, los monjes se dedicaban a la lectura y hacían copias de algunas obras importantes. Sin embargo, también es cierto que estos monjes ávidos de escritura borraban textos antiguos para usar los rollos y escribir en ellos. 
Gutenberg inventó la imprenta en 1440, lo que de alguna manera define el surgimiento de la industria editorial y el auge del libro. Gracias al invento de la imprenta, aumentó la cantidad de libros publicados y bajó su costo. 
Los libros posteriores a la invención de la imprenta pero anteriores a 1501 son llamados incunables (del latín incunabulae). El término hace referencia a las primera etapa de la impresión o "primera infancia" de los libros. Se estima que el número de incunables no supera los 30000 libros. 
El sistema braille fue creado en 1829 por Louis Braille y modificado en los años siguientes. En 1837, el Institute for Blind Youth publicó el primer libro en braille, A brief History of France, edición de la que solo quedan tres ejemplares en todo el mundo.

A pesar de que muchos creen que el libro más vendido de toda la historia es la Biblia, es imposible llevar un conteo exacto de la cantidad de ejemplares editados y vendidos. Tampoco es fácil determinar cuántos libros se vendieron de Don Quijote de la Mancha, de Miguel de Cervantes, pero se estima que lleva más de 500 millones de copias vendidas. ¿Más datos? Se vendieron 150 y 140 millones de copias de El Señor de los Anillos y El Principito respectivamente.

viernes, 10 de julio de 2015

Y este también. Espero que os resulte interesante

CUENTOS INFANTILES CON VALORES

Si hay algo que fomentamos desde Cuentos Infantiles Cortos es el aprendizaje a través de la lectura de los cuentos con valores. Así que hoy te contamos por qué es importante inculcar a los niños los valores humanos desde su infancia, además de contarte cómo escribir un cuento con valores, los tipos de valores que hay, y cuales son los beneficios de la educación en valores.

CUENTOS INFANTILES CON VALORES ¿QUE SON?

La idea que se tiene cuando se dice: “te voy a contar un cuento”, siempre es la misma. Se comienza describiendo un escenario, incluyendo unos personajes, hilando una historia, y se termina con una moraleja. Dicha moraleja, no es otra cosa sino la enseñanza que resume el cuento que se acaba de relatar, la cual está repleta de tesoros… Los valores, los cuentos infantiles con valores.
Los valores son características morales atribuibles a las personas, que después de un consenso social, se llegan a clasificar y catalogar en una escala, la cual cambia de una persona a otra. Si bien, en este caso y en relación a los cuentos, se tratará la idea de los valores como algo positivo, que se transmite de manera indirecta en los relatos, y que antes o después, hacen huella en las pequeñas personalidades de los niños, definiendo su temperamento.

COMO ESCRIBIR UN CUENTO CON VALORES PARA EDUCAR

Esta divertida tarea que asumen los padres como escritores ingenuos, se puede realizar en cualquier contexto o situación, además ellos parten de la base de una escala de valores afianzada en su persona y en la familia que han creado. Rodeados de un entorno con sus propios tesoros, es fácil concentrarse un momento, y dejar que fluyan las palabras para construir una historia que al contarla, removerá conciencias adultas, y transportará al público infantil a un mundo de fantasía y color, donde esos tesoros serán sorpresas que los niños irán descubriendo y asumiendo como parte de ellos mismos. Ese es el objetivo último del valor, impregnar mentes pequeñas para crecer como adultos atesorados.
La pregunta en este punto es ¿cómo introducir los conceptos de los valores en los cuentos infantiles que se quiere contar?, pues bien, es sencillo. Igual que cuando se escribe el cuento, se hacen descripciones de los lugares y los personajes, se pueden incluir los valores como parte de los personajes, así ya se está atribuyendo el valor a algo con vida y sentimientos, que es el primer paso. Sin lugar a dudas, esos valores son siempre positivos o potencialmente mejorables en los cuentos, con el fin de evitar frustraciones si algún niño cree que no posee ese tesoro, pero entiende que lo puede llegar a conseguir con ayuda de los demás y su propio esfuerzo.
La temática de cuentos sobre acontecimientos acaecidos durante el día a los hijos, no sólo facilita la tarea de los padres a la hora de desarrollar la trama de la historia, sino que también facilita que los niños se vean reflejados en la narración, y adopten más rápidamente tanto las enseñanzas del cuento, como la comprensión de los valores que se expliciten.

TIPOS DE VALORES DE LOS CUENTOS INFANTILES

Los tipos de valores que entran en juego en un cuento son la valentía, el esfuerzo, la amistad, la compasión, la gratitud, la generosidad, la honestidad, la humildad, el respeto, la responsabilidad, la tolerancia, y muchos más que día a día se ponen en práctica, y ayudan a ser mejor personas. Con estas herramientas para enriquecer cuentos, se verá la capacidad innata que se tiene de transmitir valores sin apenas dificultad, ya que quien más y quien menos, lo que sabe de valores lo ha aprendido de los cuentos, como ejemplos: La liebre y la tortuga (constancia), Pinocho (sinceridad), El patito feo (humildad).

CONTAR CUENTOS CON VALORES

La emoción e ilusión que debe ponerse en cualquier relato contado a niños, hacen que prolifiquen sentimientos de todo tipo, que ayudan a incluir los valores mencionados, en el entendimiento de la moraleja del cuento.
Los cuentos sirven para enseñar elementos nuevos, a parte de que si se trata como herramientas muy potentes de educación, y se confía en ellas, se alcanzan niveles muy óptimos de desarrollo personal infantil y adulto. A parte, si se trata de cuentos personalizados, inventados por los padres, al contarlos se establecen unas relaciones con los hijos, que fijan con fuerza los nexos de unión entre mayores y pequeños de la familia.
Todo lo que se haga para reforzar el comportamiento de los niños en cuanto a cultura y aprendizaje, potenciará directa o indirectamente la carga emotiva familiar que supone, así como la mejora de memoria y asimilación de lo que se vaya narrando, ya que los niños lo tomarán como algo nuevo, y sobretodo, algo que le están contando sus padres, la atención que reciben en ese momento, hace que los niños tengan abiertos todos los canales de información posibles, y que les cueste cerrarlos para irse a dormir, ya que en esos momentos, son realmente felices.

EDUCAR EN FAMILIA A TRAVES DE LOS CUENTOS INFANTILES CON VALORES

Desde el momento en que los padres se sientan a escribir su cuento del día para leer a sus hijos por la noche, se está educando en familia.
Educar en familia implica tanto dar cabida a los quehaceres diarios educativos realizados de manera conjunta, donde se compartan experiencias que puedan servir de aprendizaje a todos, como que las enseñanzas por parte de los padres se fundamenten en la educación como base fundamental del desarrollo de las familias. Es aquí, donde entran en juego los valores y su difusión familiar.
Cada familia tendrá su escala de valores, y dará mayor o menor importancia a los mismos, según la educación que los padres hayan recibido, las experiencias que les hayan marcado especialmente, o el día a día con sus propios hijos, que de alguna manera, modula y modera los valores que van tomando primeras posiciones en dicha escala. Estas escalas son las que se plasman en los cuentos que se van escribiendo.
De manera general, y entre personas aparentemente normales, los valores serán similares, y hasta cierto punto se compartirán las escalas, quizás lo único que cambien sea la posición de dichos valores. Esto da a entender que todas las familias intentan educar con los valores presentes continuamente. Por lo que escribir y contar cuentos se podría llegar a convertir en una forma adicional de educación, donde existiese un uso compartido de los mismos.

LOS CUENTOS INFANTILES CON VALORES, CONCLUSIONES

Si unimos el hecho de compartir experiencias a través de cuentos redactados teniendo presentes los valores que se determinen y en familia, literalmente expresado, se tiene una herramienta muy potente en el ámbito de la educación familiar. En todas las vertientes educativas, sería una experiencia esclarecedora en el aprendizaje de rutinas para los niños, y en la asimilación de conceptos que sin un cuento narrado, se tornan complicados y aburridos para los pequeños.
Si se viera la oportunidad y se tuviera tiempo disponible para crear momentos familiares, narrar estos cuentos en familia, padres e hijos, sería algo parecido a una odisea alcanzable, con unos resultados majestuosos en cuanto a establecimiento de lazos familiares importantes entre padres e hijos, que de alguna manera, actualmente y por las circunstancias de la situación social, es prácticamente imposible, por lo que se debería de considerar una actividad para plantearse al menos una vez a la semana, y de ahí, obtener conclusiones y compartirlas, para aprender del presente, y mirar hacia el futuro de manera más abierta, más educativa y más enriquecedora para los niños de esta sociedad ocupada y rápida que les ha tocado vivir.


Acaba de caer en mis manos y me ha parecido interesante para que practiquen este verano : Como contar un cuento

COMO CONTAR UN CUENTO

Hoy os enseñamos unos sencillos pasos para que aprendáis a contar cuentos, alguna vez te has preguntado cómo contar cuentos, por donde empezar, qué partes tienen los cuentos, etc…, Pues bien, hoy os daremos las claves para que contéis cuentos infantiles a vuestros hijos o alumnos como auténticos cuentacuentos.

COMO CONTAR UN CUENTO: PASOS

ÉRASE UNA VEZ…

Érase una vez una madre que quería contar un cuento a sus niños a la hora de dormir, y no sabía muy bien cómo hacerlo… Exploró en el buscador de internet cómo contar un cuento, y se inició en la lectura de las instrucciones que aparecían en la pantalla.
Cuando llevaba tres minutos leyendo, se percató de lo aburrida que estaba, apenas estaba asimilando lo que leía porque había mucha información, y nada le aclaraba cómo empezar a contar el cuento, ni cómo enlazar con el final. Apagó el ordenador, y comenzó a pensar

QUE QUIERO CONTAR EN EL CUENTO

La madre se dio cuenta de que uno de los primeros pasos para poder contar un cuento era saber sobre qué quería contarlo. Así que se puso a buscar en su memoria, daba vueltas y vueltas a los cuentos que se sabía de cuando era pequeña, pero ninguno le convencía. En el fondo quería ser la mejor madre del mundo contando un cuento a sus pequeños que les quitase el sueño, que les emocionase tanto que no pudieran dormirse… Siguió pensando, hasta que de repente, abrió mucho los ojos, y dijo: ¡Ya está!
Comenzó a escribir en su libreta de anotaciones, parecían palabras inconexas, hermano pequeño, acariciar, mirada, manotazos… La tarde anterior había vivido un episodio en casa que no le había convencido mucho, ya que su hija mayor estaba sufriendo celos de su hermano pequeño, y en ocasiones, sin motivo aparente, le empujaba y le hacía caer al suelo, o le quitaba los juguetes que él tenía, y luego no los utilizaba… La madre sufrió al ver esto, y se le ocurrió contar a sus hijos un cuento sobre cómo deben quererse los hermanos. Pensó oportunamente, que hablar en un cuento sobre un problema real y personalizado ayudaría a poner algo de cordura en la relación filial, y que de esa manera, ambos hijos aprenderían enseñanzas nuevas y valores de una manera poco común, hecho que les llamaría más la atención.
Fue enlazando detalles de lo que había visto la tarde anterior, analizando la relación que se había tornado sin quererlo hacia un lado algo caótico, viendo como se podría enderezar, poniendo nombre a los personajes, los cuales eran dos frutas que siempre iban juntas, fue añadiendo aclaraciones para determinar la historia, definir bien los personajes, y poder unir toda esa macedonia con un final que realmente fuera cautivador para los niños. Una vez hecho esto, tenía la redacción completa, incluida la moraleja final, guinda de cualquier cuento.

COMO CONTAR UN CUENTO PARA CAPTAR LA ATENCION DE LOS NIÑOS

La madre se aprendió muy bien la historia, pues aunque leería su cuento, no quería que la memoria le jugase una injusta pasada. Había preferido dedicar espacio mental a disfrutar del cuento, preocupándose por darle la entonación más adecuada según el momento de la narración, dar expresividad a su voz, con altibajos de la misma para generar mayor interés y atención en los niños, y hacer que el cuento fuera sonorizado, que pareciese que hablaba por sí mismo.
Así, cada vez que apareciese un nuevo personaje en escena, la madre ponía una voz diferente, estaba personalizando cada participante del cuento, lo cual despertaba el interés en los pequeños, que de vez en cuando hacían preguntas y aclaraciones de los personajes. Si en el cuento algo caía al suelo, o alguien roncaba, interpretaba las onomatopeyas para darle más sonoridad y creencia a la historia. Y poco a poco, consiguió que sus hijos estuvieran estupefactos, sin pestañear, y con una expresión de expectación en el rostro que demostraba que sus cinco sentidos estaban funcionando al máximo rendimiento.
Realmente estaban disfrutando del cuento, al igual que la madre, que contaba y contaba, con gestos, muecas, voces diferentes… De vez en cuando, la madre les preguntaba algo relacionado con el cuento, o les hacía repetir alguna palabra mágica, a lo que los niños respondían ilusionados y rápido, porque estaban ansiosos por saber que pasaría un instante después en su historia. Todos estaban inmersos en una atmósfera de imaginación e ilusión difícil de disolver en esos momentos, y tan sólo existía alguna conexión con la realidad porque estaban en la habitación en penumbra, sin luces ni estímulos de ningún tipo, tan sólo la voz de su madre, y el papel entre las manos, lo cual les recordaba que en algún momento tenían que dormirse, pero no podían. El cuento estaba terminando, y ellos debían seguir bien atentos…

EL MEJOR AMBIENTE PARA CONTAR CUENTOS

¿Porqué esa madre estaba disfrutando tanto contando su pequeña historia? Seguramente se sentía muy orgullosa de sus hijos, de cómo estaban aprendiendo tantas cosas a través del cuento que ella misma había escrito casi sin darse cuenta, y que ahora estaba disfrutando al contarlo, estaba experimentando una sensación de bienestar, orgullo y satisfacción difícil de describir y de comparar con algo tan cotidiano y sencillo como lo era un cuento.
Para que esto estuviese ocurriendo, la madre eligió el momento más armonioso para todos. El placer de ir a dormir después de una agotadora jornada de actividades, y el cansancio acumulado de ello en los niños y en la madre, hacían que los canales de información en todos estuviesen en reposo absoluto, de manera que las enseñanzas derivadas del cuento pulularan por las mentes infantiles como mariposas por el aire, que se posa cuando ve una flor abierta. Así, los niños asimilaban de manera especial y relajada, lo que la madre les estaba contando.
Los niños sabían que su madre les estaba dedicando ese espacio de tiempo de manera exclusiva a ellos, de manera totalmente desinteresada, y de forma particular, estaba contando el cuento, no leyéndolo, por lo que implicaba recrearse con el cuento, vivirlo, disfrutarlo, todo ésto estaba generando un ambiente muy propicio y muy positivo para la complicidad paterno-filial, que se estaba consolidando plenamente.

MORALEJA DE COMO CONTAR UN CUENTO

La moraleja como bien se sabe, es el aprendizaje resumen de una historia real o imaginaria, en este caso, de un cuento. Contar un cuento, actividad aparentemente tan sencilla y retadora, llega a tener un alcance formidable en el desarrollo de los pequeños, donde no parece haber límites, y se empatiza con el mundo en sus dos vertientes, real e imaginario, de manera resolutiva, aprendiendo a solucionar conflictos, y donde se desarrolla la imaginación hasta límites insospechados.